Un náufrago, capitán de un barco sin rumbo

Cuando la soledad te invade, no sabes qué hacer. Cuando te sientes rechazado, te sientes raro, es ahí a lo que ataca este poema.


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'Un náufrago, capitán de un barco sin rumbo'
por Luis Ojeda

En otro momento no escribiría lo que escribo
en otro momento estaría más feliz de lo que estoy
pues en otro momento, estuve feliz
pues ahora, en este momento, solo estoy

Declaro a esta alma como un barco perdido
en altamar perdido
sin rumbo donde ir
pues tierra alguna nunca más vio venir

Y es que no hay tierra firme para recalar
no, para esta vida no existe puerto alguno
pues ningun lugar necesita de esta mercancia
ningun puerto donde descansar

De todas formas, una nave que ha navegado muchos mares
una nave que ha visitado los más diversos puertos
pero sólo visitado
ya que ninguno ha sido un puerto donde tripulante se haya quedado

A tantos puertos, tanta experiencia
algunos más importantes que otros, pero con la misma ciencia
y es que cada visita te marca en la conciencia
y a tantos puertos, tantas marcas en la inconciencia

Este náufrago con un barco sin rumbo
navega sin un fin
navega porque la vida dice que navegue
navega porque sí

Y mientras más navega,
más puertos encuentra
y tierras nuevas conoce en su viaje
y por que no, tambien hermosos parajes

Pero luego de visitar
retorna a alta mar
y al sentirse solo nuevamente
desea volver a visitar el ultimo lugar

Pero ya no puede, porque no tiene mapa
no tiene brujula, no tiene carta astral
y el mar borra las huellas dejadas al caminar

Entonces sólo resta seguir navegando a la deriva
por si este naufrago encuentra su puerto
ese puerto que lo recibirá sin problemas y con alegría
porque ese puerto necesita de su mercancía
y en ese puerto encontrará el mapa de su vida


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Ese náufrago es como el loco de la colina, ese que grita muy fuerte y en todos los idiomas, pero que nadie lo oye, y de todas formas, ve ponerse el sol y cómo gira el mundo, siguiendo su marcha.